La concejala de Medio Ambiente, Montaña Jiménez, ha mantenido un encuentro con los vecinos de El Junquillo, que se ha prolongado durante más de una hora, para explicar el proyecto para la puesta en marcha de uno punto limpio en la intersección de las calles Dalia y Amapola, junto a la nacional 521.
Según ha explicado Jiménez, lo que se pretende con estos puntos limpios es que cuando realicen obras menores exista un lugar en el que depositar los elementos de esos trabajos (ladrillos, azulejos, plaquetas, etc.) para que, posteriormente, el ayuntamiento se ocupe de su tratamiento, cuidando así nuestro entorno y evitando que se depositen restos en lugares no autorizados. También ha recordado que son cuatro los puntos habilitados con este fin en todo el término municipal con el objetivo de que haya una equidistancia que permita dar servicio en todas las zonas.
En cuanto a las características, Jiménez ha incidido en que no se trata de escombreras, sino de lugares de acopio que luego el propio ayuntamiento se encarga de tratar, además de contar con medidas para que no produzca impacto visual ni en el barrio ni en el entorno, como es el ajardinamiento, algo que se ha explicado a los vecinos.
Ante las preguntas sobre el motivo por el cual se ha decidido ubicar uno de estos puntos limpios en El Junquillo, la concejala ha explicado que por ubicación geográfica respecto a los otros tres, por proximidad a las vías de comunicación, por ser una parcela municipal y por estar en el camino de la antigua zona de depósitos de residuos de la Labradora se había considerado la mejora ubicación. Respecto a las preguntas de por qué se ha trasladado del emplazamiento inicial previsto, Jiménez ha señalado que la parcela de Macondo contaba con problemas a la hora de tener que ejecutar movimiento de tierras, algo que no sucede en el emplazamiento actual, como también se explicó en comisión.
El PSOE busca la división de los barrios
Por otra parte, desde el equipo de Gobierno se ha acusado al PSOE de buscar la división y la confrontación de los barrios con las “absurdas” declaraciones que ha efectuado sobre si unos barrios votan o dejan de votar a unos u otros partidos políticos, puesto que todos son ciudadanos, indistintamente de ideología, religión o cualquier otra cuestión.
Para el equipo de Gobierno todos los barrios son de primera y declaraciones como las efectuadas por Salaya son un ejemplo de cómo se hace política desde el PSOE, buscando la confrontación y la división. Aquí no hay sitios de unos u otros, sino una ciudad de todos los cacereños en las que cada uno tiene la ideología que quiere o vota a quién le parece pertinente, pero no son patrimonio de nadie, sino de su propia libertad de elegir en cada momento a quién le parezca mejor.
Por todo, desde el equipo de Gobierno se ha señalado que la ubicación de los cuatro puntos limpios dará un buen servicio a los cacereños y se ha acusado al PSOE de buscar el enfrentamiento y la división intentando catalogar a los barrios de Cáceres de primera o de segunda, cuanto todos son vitales para nuestra ciudad, se ha concluido.
