El Ayuntamiento de Cáceres ha sacado a licitación el servicio de asistencia técnica de redacción de proyecto y dirección facultativa completa de la adecuación y puesta en valor de la Cueva del Conejar, dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino denominado ‘Cáceres 2025-Capital de las Culturas y del Turismo Verde Urbano’, en el marco del Plan de Recuperación, transformación y Resiliencia -Financiado por la Unión Europea-NextGenerationEU, por un importe de 11.000 euros y un plazo de ejecución de 270 días. El plazo de presentación de ofertas finaliza el 9 de marzo.

El objeto es definir las prescripciones técnicas a las que ha de someterse el proceso de convocatoria, selección, contratación y finalmente desarrollo de los trabajos de redacción de proyecto y posterior dirección facultativa para la adecuación del espacio de la Cueva del Conejar; el objetivo es que sea visitable y utilizable como espacio divulgativo, tanto propio como del resto de contenidos del Calerizo cacereño (al ser la única cueva visitable, en la actualidad, y por ello susceptible de acoger esta actividad).

La Cueva del Conejar es una de las cavidades kársticas (una dolina) que forman parte del complejo kárstico del Calerizo de Cáceres, clave para la supervivencia del ser humano en la penillanura cacereña, al asegurar el abastecimiento de agua, incluso en los meses más secos.

La actividad arqueológica en El Conejar se inicia alrededor de 1917, cuando Ismael del Pan publica un artículo sobre unas excavaciones en la que llama Cueva del Oso, dando a conocer diferentes útiles líticos y restos de fauna. Le sucede un largo silencio, hasta que en la década de 1980, la Universidad de Extremadura vuelve a excavar en la cavidad. Las últimas actuaciones las realiza el Equipo de Primeros Pobladores de Extremadura en los años 2000 y 2010, al analizar varias brechas intactas dentro de una cavidad bastante removida.

Los resultados de estos estudios muestran varias fases. Las más antiguas tienen una antigüedad de unos 15.000-17.000 años, lo que enlazarían con la cercana Cueva de Maltravieso (en cuya Sala de las Chimeneas se realizó una datación de unos 17.000 años). Las más recientes se fechan hace unos 6.000 años, asociadas con unos estratos con presencia cerámica, lo que sirve para enlazar con Los Barruecos (Malpartida de Cáceres). Hay otra datación intermedia de unos 8.000 años (coincidiendo con los últimos grupos de cazadores-recolectores).

Finalmente, en una brecha, aparecieron materiales cerámicos con una antigüedad de unos 3.000-4.000 años (Neolítico-Calcolítico). Los diferentes estudios muestran unos grupos humanos encuadrados en el periodo conocido como Epipaleolítico. Un periodo de transición entre una sociedad de cazadores-recolectores del Paleolítico Superior a las primeras sociedades productoras de alimentos del Neolítico y con ellas una nueva estructura social. Las abundantes muestras de fauna, pólenes, semillas corroboran este cambio.

El concejal de Turismo, Jorge Villar, ha señalado que “continuamos con las contrataciones dentro de este plan como ya hemos hecho con licitación los servicios de asistencia técnica para la gerencia y evaluación del mismo”.

“Este es un proyecto muy importante porque complementa el nuevo tipo de ofertas que vamos a dar dentro de la ciudad, con la recreación de la Cueva de Maltavieso, y que va a permitir atraer a un nuevo tipo de turista, el familiar, que tan importante va a ser dentro de la composición de nuestro turismo en los próximos años y que competa muy bien el turismo de naturaleza y patrimonial que ya tenemos”, ha aseverado Villar.